Cosmética ecológica: cuando esos ingredientes, más del 95%, son producidos por sistemas agroecológicos, sin pesticidas o abonos de síntesis química, ni OGM (organismos modificados genéticamente) y son certificados por un organismo competente, pueden llevar el sello u aval del organismo y usar en su etiquetado los términos: ecológico, orgánico, biológico o sus sufijos: eco, bio.
Slow Cosmetics (Cosmética lenta) Nace con los principios que el primer movimiento de la gastronomía, de la oposición a la Fast Food (comida rápida). Frente a la globalización de una gastronomía normalizada, de gran gasto en combustibles, de la pérdida de la dignidad cultural y la pérdida de los sistemas de producción tradicionales ligados al territorio.
Luego vino el concepto "Slow Life" y en ella se incluye Slow Cosmetics, partiendo de
- ingredientes naturales
- priorizando los productos locales, evitando los grandes kilometrajes
- priorizando los ingredientes ecológicos o BIO
- priorizando la calidad, los ritmos naturales, el medio ambiente y la salud de los usuarios.
Pensemos un poco antes de consumir:
- productos naturales en la cantidad necesaria
- evitemos cargar con muchos productos que nos prometan grandes milagros
- seamos respetuosos con el medio ambiente, evitemos grandes embalajes, productos que deforesten zonas tropicales, productos que tengan una alta huella ecológica, productos con ingredientes de síntesis química, ...
- disfrutemos de técnicas ancestrales, recolectemos las plantas en su momento ideal, dejemos macerar el tiempo necesario, usemos aceites vegetales que nos hidraten la piel y activen o nos relajen, de masajes asiáticos, no abusemos del sol, .... si nos cuidamos hoy, mañana no necesitaremos grandes milagros.
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